Amplitud (Intensidad)
El sonido se mueve a través del aire en forma de ondas, la amplitud es la distancia entre el punto más alto y el más bajo de una onda. La amplitud del sonido es la intensidad (lo que comunmente llamamos "el volúmen"). Es lo que hace que lo escuchemos en nuestros oídos más fuerte o más suave.
Si trabajásemos en una estación de radio o con editores de sonido digitales diríamos más o menos amplitud en lugar de bajar o subir el volumen.
Frecuencia (Altura)
La frecuencia de un sonido se mide en Hercios (Hertz, Hz) y describe la cantidad de ondas por segundo que completan un ciclo. Es el tono o altura del sonido. Así se diferencia un sonido agudo de uno grave. El oído humano es capaz de percibir las frecuencias que se encuentren entre 20 Hertz y 20 kilohertz.
Timbre
El timbre es una propiedad del sonido difícil de explicar científicamente. Es la diferencia entre dos sonidos de la misma amplitud y frecuencia. El mejor ejemplo son los distintos instrumentos musicales.
El timbre es lo que caracteriza a cada instrumento que pueden tocar la misma nota (Frecuencia) y al mismo volumen (Amplitud) y aún así podemos identificar a cada instrumento gracias a que tienen un timbre distinto.
El sonido tiene otras características como la espacialidad (pues se propaga en un espacio) y la duración (las ondas viajan durante un tiempo determinado), aunque generalmente las tres primeras son las que más se estudian.
CATEGORIAS DE LAS ONDAS DE SONIDO:
Las ondas acústicas pueden clasificarse en tres categorías que cubren gamas diferentes de frecuencia:
Las ondas audibles: son ondas longitudinales que están dentro del rango de la sensibilidad del oído humano, aproximadamente 20 a 20 000 Hz.
Ondas infrasónicas: son ondas longitudinales con frecuencias debajo de la gama audible.
Ondas ultrasónicas: son ondas longitudinales con frecuencias por encima de la gama audible de los seres humanos y son producidas por cierto tipo de silbatos.